Salimos de Tokio aquella manana rumbo a las montañas, era nuestra primera experiencia en los trenes Japoneses y por mas que tuvimos que cambiar 3 veces de tren para llegar a Yudanaka fue super facil moverse de un lado a otro. Estando en Inglaterra compramos un pase por 7 dias (Japan Railway Pass) con el que podemos viajar en tren a cualquier lado, es la manera mas facil y barata de ir a cualquier lado en Japon, porque los trenes son carisimos. El unico tren que no podiamos usar es el tren-bala (bullet train) que va a aproximadamente a 600 km por hora … a nosotros solo nos dejaron usar el que va a 550 km por hora!
Para llegar a Yudanaka tuvimos que cambiar de tren en Omiya, Nagano y despues coger el tren local hasta las montañas, para decirles la verdad en todo el tiempo que viajamos no vi ni un pedacito del campo, en todas partes hay casas … es como si una ciudad se acabara y en algun momento empieza la otra y todas estan unidas … hay una sobrepoblacion increible. Cuando ivamos a coger el ultimo trencito, fue muy gracioso porque en vez de que el tren cambiara de direccion, ellos voltean todas las sillas automaticamente … asi todos estan siempre mirando para adelante, no importa en que direccion va el tren.
Llegamos a Yudanaka y casi que no encontramos el Uotoshi Ryokan donde nos ivamos a hospedar. Despues de que almorzamos, dejamos las mochilas y Mr Miyasaka. nos llevo hasta la entrada de “Monkey Park” (el parque de los monos) que queda en el Parque Nacional Jigokudani Yaenkoen. Tuvimos tanta buena suerte que la noche anterior habia nevado y estaban las montanas preciosas, aquel dia tambien salio el sol y poco a poco la nieve se fue derritiendo. Mientras caminabamos hacia el parque por un caminito cubierto de nieve y lodo, a veces teniamos que esquivar la nieve que se habia atascado en los arboles. No sabia si mirar para arriba para prevenir la caida de la nieve, o hacia abajo para no caerme o hacia los lados buscando los monos.
Cuando llegamos a la entrada del parque vi mi primer mono, son divinos! Dave decia que por el hecho de ver mi sonrisa, valio la pena el viaje. Es increible como estan tan acostumbrados a los seres humanos que uno se les hace al lado y ni bolas le paran a uno, es mas, siempre te dan la espalda y te ignoran … es super dificil tomarles fotos de la cara porque nunca te miran … claro que decian que uno no se debe quedar mirandolos porque lo consideran como un simbolo de agresion y pueden atacar … aunque les confieso que me parecieron tan inofensivos y estan tan acostumbrados a los seres humanos, que parece imposible que puedan atacar a alguien, aunque no me quede mirandolos por si las moscas.
Mas adelante llegamos a una de las piscinas termales mas grandes y habia montones de ellos bañandose. Claro como afuera hace frio, entonses se meten al agua para calentarse, lo unico que se les ve son las cabezas. Los bebes se suben a la espalda de las madres y todos se quedan ahi quieticos disfrutando del agua caliente. Que vida! De vez en cuando el mono principal les hace entender a los mas debiles quien esta a cargo, les grita un poco y parece un rey, acostado como un pacha, dejandose atender por todas las mujeres. Las caras son increibles, cada uno tiene facciones diferentes y demuestran lo que sienten, algunos se veian tristes, otros bravos, otros serios … era como si cada uno tuviera su propia personalidad, incluso los chiquitos se diferencian unos de otros .. y realmente parecen niños chiquitos, jugando y son los unicos que tratan de jugar con uno. Son realmente increibles … la verdad que no me queria ir de alla … pero el frio nos hecho, llego un momento en el que estabamos congelados. Si quieren mirar la pagina donde hay una camara en vivo, vallan a el siguiente sitio de internet (es en Ingles/Japones
Aquella tardecita caminamos por Yudanaka y las aguas termales pasan por la mitad del pueblo, hay baños publicos por todas partes (separados para las mujeres y para los hombres), yo me pegue un baño buenisimo aquella noche en el Ryokan. Mejor dicho, uno se baña primero y despues cuando ya este limpio se mete en el “Onsen” para relajarse (aunque el agua esta a 40 grados de temperatura) … calentisimo, pero buenisimo.
Aquella noche, gracias a que todos los lugares donde planeamos cenar estaban cerrados tuvimos la mejor comida de todo el viaje, sin darnos cuenta terminamos cenando en un lugar que prepara comida para los que practican “Sumo”, aquellos hombres gordototes que se alimentan muuuuuy bien … nosotros solo comimos un poquitico de lo que ellos comen normalmente y les puedo decir que es super alimenticio y llenador (es un caldo lleno de vegetales cocinados … delicioso).
La visita a los monos valio la pena, fue solo una noche, pero fue maravilloso verlos … son realmente increibles! y para mi fue un dia inolvidable (el mejor).
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