Cuando uno sale de la parte antigua de Hongjiang y empieza a explorar sus alrededores se encuentra con un pueblo que no tiene ningún tipo de carácter y que no tiene mucha vida, hay un montón de almacenes por los alrededores pero ningún lugar donde uno pueda sentarse a tomar algo o a descansar. Los Chinos (en esta parte del país), no tienen la costumbre de cafecitos o casas de te y uno a veces se pregunta que hacen cuando tienen que entretenerse? a donde van todos? ... cuando caminábamos por la sección antigua me impresiono que no había nadie por sus callecitas durante la mayoría del día o de la noche, es posible que este pueblo este desolado? que todos se hallan ido y que solo queden unos cuantos?
Caminamos sin rumbo fijo y en la guia había una corta mención de los restaurantes que había al lado del rio, así que hacia allí nos dirigimos. Los restaurantes están abandonados, no se ve nada sino la grasa acumulada en sus ventanas y puertas que permanecen cerradas con candados. No encontramos nada de interés, estábamos a punto de devolvernos cuando nos dio por seguir unos pocos metros mas y nos encontramos con el principio de un mercadito que estaba al otro lado del puente.
Fue alli donde encontramos a toda la gente del pueblo haciendo sus compras diarias, conversando con sus amigos, vendiendo sus productos, pasando el dia, tomando te, jugando a las cartas o al mahjong ... alli era donde todos se escondian en el dia. Que bien. El mercado en si no tenia nada de especial eran edificios viejos y decadentes que habian sido tomados a la brava por los vendedores para poner sus canastos o carretillas con sus productos, algunos de ellos con tan poca mercancia que daba pena, pero que seguro les ayuda con el sustento diario para alimentar a su familia o que les da la disculpa para salir de casa y socializar.
En los edificios habian puesto mesas donde la gente se dedicaba al juego, esas si que estaban llenas, se ve que se pasan el dia jugando y es un entretenimiento (o negocio) bastante serio. En China esta prohibido por ley el jugar por dinero ya que crea una adicción que es difícil de controlar. Asi que todos juegan a escondidas, siempre los ve uno en lugares completamente apartados o escondidos donde la policia raramente pasa o donde hacen la vista gorda a cambio de algunos Yuan. En algunos paises fronterizos como Laos, Vietnam ... se han dado cuenta de esta addicion y han hecho una fortuna al construir pueblos llenos de casinos en las fronteras con China donde ellos puedan calmar las ansias de sus vecinos de jugar y gastar una fortuna sin tener un problema en su propia tierra. El mismo gobierno Chino se ha dado cuenta del monton de dinero que puede hacer con esta addicion y hasta a dejado que lugares como Macau continuen con sus casinos y calmen de cierta manera el bichito del juego sin que la plata salga del país y que de cierta manera sea algo legal y que puedan a su vez controlar.
Bueno, pero me distraje un poco de mi mercado. Decía yo, lo mucho que me gusto este lugar porque se nota que nunca habían contado con la presencia de un extranjero que recorriera sus calles y les prestara tanta atencion. Acá me di cuenta de una gran ventaja de tener una cámara digital que muestre la foto grande en la parte de atras. Cada que tomaba una foto me daba por mostrarsela a la persona primero que todo para preguntarle si le gustaba (por señas por supuesto) y para hacer un poco de amistad. La mayoría de ellos sonreía, se la mostraba a los demás o me pedía que tomara una foto de su compañero del lado. Otros me pedían que la borrara (lo que a veces hacia o simplemente ignoraba con una sonrisa y una señal ficticia de que ya lo había hecho ... generalmente esas eran las mejores fotos). De esa forma me volví no solo una espectadora, sino que me involucre de parte activa en el día a día y me gane mas de una sonrisa y una que otra amistad que duro 5 minutos. Otros simplemente por costumbre, me ignoraron.
Esto es lo que mas me gusta de estos viajes, encontrar lugares que uno no se espera y ver como vive la gente. Honjiang puede tener su parte antigua con mucha historia y llena de turistas que vienen por una sola tarde a conocer su pasado, pero para mi este mercado fue la mejor parte de todas. Reconozco que la historia y los edificios de la época Qing son súper interesantes, pero el presente con su simpleza y sus nuevas tradiciones también tienen un encanto que esta ahí, frente a nuestros ojos, listo para ser descubierto.
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