Wednesday, 3 October 2012

Una linda sorpresa visitando el pueblo de Basha



A veces es dificil decidir a donde ir cuando uno no tiene un rumbo definido y cuando esta dejando que el azar juege una estrategia unica en la eleccion de los lugares que vamos a visitar, uno no sabe que puede esperar o en que basarse para escoger si un lugar merece una visita larga o corta o si mas bien es mejor ignorarlo y seguir de largo. En el caso de Basha, fue como tirar los dados a la suerte y dejar que el destino tomara la decision indicada. En las guias no decia practicamente nada, decia que era un pueblo un poco aislado donde vivia una minoria con una particularidad muy especial: el gobierno les permitia llevar armas como siempre lo habian hecho, tambien decia que no habian hoteles y que la mayoria de la gente iva solo por el dia ... asi que sin mucha informacion decidimos hacer precisamente eso: quedarnos en el pueblo mas cercano e ir a ver porque sin muchas razones, porque este pueblo merecia una mencion.


El destino nos trajo una buena sorpresa, en el bus en el que ivamos iva una pareja que habiamos visto anteriormente en otro pueblo y que nos habia ayudado a encontrar una direccion, la chica hablaba ingles y habia sido muy amable. Los saludamos, intercambiamos unas frases cortas y despues de eso cada pareja ignoro a la otra durante todo el viaje. Cuando llegamos a nuestro destino creo que nos vieron la cara de desorientados porque no teniamos ni idea a donde ir, resulto que ellos seguian en un taxi hasta el pueblo de Basha y se ivan a quedar con una familia, nosotros mencionamos que ese era nuestro destino final pero que sabiamos que no habia hoteles y sin pensarlo dos veces nos invitaron a ir con ellos, nosotros ni cortos ni perezosos, agarramos nuestras mochilas y los seguimos sin chistear.

Aunque duro solo una noche porque el pueblo es diminuto, aunque fue una experiencia muy interesante. Nos llevamos a nuestra habitacion que era en una casa bastante sencilla de madera, en la que no tenian muchos muebles y la cocina en la parte exterior con una vista del pueblo espectacular; el lugar perfecto para pasar la noche. Nuestros “amigos” nos preguntaron si teniamos hambre y que si queriamos compartir la cena, ellos pidieron por nosotros y nos sentamos a la mesa sin saber que manjar nos iva a tocar, todo era sorpresa. Lo unico que se es que en el menu habia pollo porque vimos pasar un niño corriendo con una gallina viva hacia la cocina y ella nunca salio de alli. Era una situacion extraña porque el chico no hablaba nada de ingles y su novia era un poco timida, asi que la conversacion no era fluida y era demasiado basica, claro que con sonrisas y señas como que todo el mundo se entiende.




Nuestra cena fue interesante, ellos venian preparados y ya sabian de antemano cuales eran las especialidades del pueblo, comimos varios tipos de vegetales preparados de formas diferentes, llego el plato de pollo que yo ya habia imaginado y mucho arroz. Ellos se veian super emocionados con los sabores porque le tomaban fotos a todo, debia de ser algo muy diferente a lo que estaban acostumbrados. En medio de charlas forzadas o mejor “esforzadas” tratando de entendernos unos a los otros, algunas tazas de te despues de la comida y un atardecer fuera de lo real, cayo la noche temprana. Sin luz y sin algun tema en comun, lo mejor era irnos a dormir temprano y recorrer el pueblo al dia siguiente.


Montones de gallos, perros y cuanto animal habia en el pueblo nos despertaron al dia siguiente, claro que la despabilada mayor ocurrio cuando entramos al baño y una super arañota nos saludo. Nos aseguramos que las maletas estaban bien cerradas para que no les entrara ningun bicho raro, desayunamos la tradicional sopa de tallarines (noodles) y nos fuimos a caminar. Encontramos un pueblo dormilon, con mujeres vestidas con trajes llenos de ribetes de colores, faldas amplias y unos lindos peinados. Algunas llegaban en unos tractores de carroceria abierta aunque la mayoria simplemente caminaba llevando sus bebes a la espalda rumbo al mercado. Nos parecio extraño no ver a nadie trabajando el campo o haciendo alguna labor productiva, era como si el pueblo estuviera desierto. Las casas se encontraban distribuidas a ambos lados de pequeñas callecitas que bajaban por las diferentes laderas que bordeaban un espacio abierto que era como una especie de area comunal, separadas por bosquecitos y caminitos de tierra, se veian largas torres de bambu donde despues descubrimos que lo usaban para secar el arroz y el maiz. No habia nadie alrededor y lo unico que indicaba que habia una vida medio normal en el pueblo era el humo que salia de las chimeneas, los perros o gallinas que andaban regados por todos lados, o que de vez en cuando habia un transeunte o un niño que nos miraba raro.


 


Las primeras horas de la mañana pasaron relativamente tranquilas y como a las 11 de la mañana empezaron a llegar ordas de turistas que inundaron el pueblo y fue ahi donde descubrimos la verdad que nos ocultaban: todos estaban listos para el show de mediodia y por supuesto cobran la entrada: de ahi su mayor fuente de ingresos y el hecho de que el campo estuviera un poco descuidado, aunque seguro no era epoca de cosecha, que va a saber uno de esas cosas.


Si, es verdad, los hombres llevan armas en los hombros pero son mas que todo simbolicas porque no tienen municiones, ellos siempre fueron guerreros y se sienten orgullosos de su hombria y de su rebeldia y la forma en que la representan es mostrando que aun siguen siendo valientes y que nadie se mete con ellos. La forma en la que se cortan el cabello tambien es una indicacion de su estatus, porque se afeitan la cabeza con cuchillo y se dejan una parte larga que se la amarran con orgullo en la cabeza. Interesante y diferente, aunque ya usen sus tradiciones para atraer al turismo es bueno ver que de una u otra forma las costumbres no se pierden y seguro que en su vida diaria cuando el turista se va seguiran valorando e inculcando sus creencias a sus hijos, para que el pasado no se pierda. Es bueno que no tienen hoteles o que la gente no se queda, asi la influencia que tienen del exterior es minima, nosotros tuvimos la fortuna de podernos quedar una noche, seguro que lo que entendimos de su costumbres fue minimo pero compartimos un techo y sus comidas, admiramos su paisaje y vimos un poco de su vida diaria. Eso hace que valoremos los pequeños instantes que el azar, la buena fortuna y los amigos inesperados nos traen de forma subita, justo cuando menos lo esperamos ... aquellos momentos son los que nunca se olvidan.


No hay palabras que describan Las Islas del Sur de Georgia ....

Aquella mañana nos despertaron a las 4 de la mañana, hoy teníamos un día largo y aun no tenia ni idea de lo que me esperaba, se supone...